TalLEres-FicCIón cOnTra lA DeseSpeRaNzA
En Casa Tomada hubo un espacio para colectivizar los sueños, abrirle cancha a la esperanza aunque sea un ratito y atrevernos a imaginar utopías sin pedir permiso. En esta sesión nos lanzamos a especular: ¿cómo sería un 2054 utópico en clave chilanga?
Este taller fue una invitación a senti-pensar más allá de la lógica resolutiva: explorar alternativas de habitar y de relacionarnos sin responder al mandato de la productividad.
Mark Fisher decía que «es más fácil imaginar el fin del mundo que el fin del capitalismo». Desde aquí quisimos contradecirlo, al menos un poco. Si la realidad es una construcción de nuestra imaginación y la vivimos como si fuera ficción, ¿qué pasa si empezamos a imaginar en común?Nos preguntamos: —¿Qué anhelos podríamos sostener colectivamente para habitar futuros comunes? —¿Qué pasa si priorizamos nuestras necesidades cotidianas como base para diseñar el mundo? —¿Qué objetos, tecnologías o relaciones sostendrían esos espacios? —¿Cómo nos transformarían esas prácticas?
El barrio se convirtió en laboratorio de utopías. Entre deseos, dibujos y preguntas, nos asomamos a partes de una ciudad donde se forman vínculos entre distintas especies y las vulnerabilidades se abordan con cuidado 💥